No nos quites la mascarilla

Publicat el 22 de juny de 2021 a les 17:00
Actualitzat el 22 de juny de 2021 a les 22:21
¡Ay Pedro! ¡Ay San Pedro! ¡No nos quites la mascarilla!

Estoy ahora mismo desconcertada, yo, que estaba a punto de plantarme con un bizcocho de agradecimiento en la próxima reunión del PROCICAT por el año y medio de paz que nos han dado y ahora ¡saz! Permitidas reuniones sociales, baile y todo ¡a cara descubierta! Cuando ya nos habíamos acostumbrado a esconder el bigote, las manchas del sol, sin la “presión” de lucir bronceado de altamar ni maquillaje. ¡No hay derecho!
 
Con lo bien que estábamos con nuestras distancias de seguridad moviendo la manito a lo lejos y prometiendo a los cuatro vientos: “en cuanto nos dejen quedamos ¡eh!”.

Luego de año y medio de audios, video llamadas grupales y cadenitas prometiendo abrazos y besos, me pregunto ¿tendrán efecto “retroactivo”? Ante todo, practicidad que esto nos pilla en plena ola de calor. Y sí, el tema de los olores corporales… en fin ¿justo ahora toca abrazarse en la vía pública? Que da un poco de miedico ir por la calle mayor y a la que te despistas visualizas a alguien que levanta los brazos y te engancha dándote palmaditas y terminando con una especie de “refriega” en la espalda. Abrazos post pandemia que le dicen. Normalmente vienen acompañados de cierta verborragia sobre temas de vacunología ¿de qué grupo eres? ¿de los chungos Astrazéneca? ¿de los pijos Pfizer? ¿o de los pirados Jansen? Y yo que pensé que no podría haber algo más cansino que los runners (se aplica este término sólo si usas bambas molonas, si son Quechua, simplemente corres) publicando sus éxitos de rutas: “he hecho 10k en 40 minutos” ¡yupi! ¿A quién le importa? ¿alguien os ha preguntado? ¡Pues sí! Ahora tenemos a los vacunólogxs hablando incansablemente del tema o ¡peor! Compartiendo selfis del momento exacto de la inoculación.

Santísimo Pedro y Bienaventurado PROCICAT ¿cómo justifico ahora la barriga, la papada y las arrugas que me quité con los filtros del insta? Yo, que me entregué “en cuerpo y alma” a la masa madre y a los cupcake (son las magdalenas de toda la vida, tan sólo uso este término por si hay algún lector menor de 20), a las series de sofá y manta. Y resulta que ahora sin más ¿hay que volver a la vida social? ¡No! ¿No podíais dejar pasar las fiestas? Ahora toca preguntar a quién le gusta la coca con fruta o crema, en casa de quién quedamos… ¡con lo fácil que era el estar en chanclas a “tus anchas” ¡con tu burbuja!
Por eso me he decidido a promover un change.org para presionarles de que nos den una tregua social este verano. Luego sí ¡eh! Quedamos ¡fijo!
 
PD1: Si te has reído al menos tres veces leyendo esta fantochada has captado la esencia del mensaje. El Humor es un gran recurso ¿cambia en algo la realidad? NO. Pero como mínimo te hará sentir mejor y liberarás endorfina, serotonina, dopamina y adrenalina.

PD2: Si no te has reído, ni tan sólo hecho una mueca, en ese caso te recomiendo que durante estas fiestas te encierres en casa. Para no aburrirte puedes quejarte utilizando alguno de tus 5 perfiles falsos en los grupos de Facebook del pueblo. Tú quéjate, de lo que sea, da igual. Crispa el ambiente, eso te relajará. Cuando te aburras critica a alguien ¡Quédate a gusto! Eso sí, si ante una situación imperiosa debes salir a la calle, ponte mascarilla. Una no, tres. No, no es por la variante Beta, es para que no nos arruines las fiestas con tu toxicidad. ¡Gracias!

¡La mejor posible de las fiestas!